lunes, 30 de noviembre de 2009

Palacio de Cutre

Restaurante hotel Palacio de cutre
La Goleta, Villamayor, Piloña
985-70-80-72
www.palaciodecutre.com





Imperdonable ha sido no mencionar en este tan distinguido blog uno de los mejores comedores de Asturias en mi modesta opinión, y es que no sólo nos quedamos en uno de los mejores restaurantes de Asturias sino que el hotel al que pertenece es una auténtica delicia, la propiedad que lo rodea parece sacado de un cuento del siglo XVIII y todo con unas vistas al Sueve y Los Picos de Europa de auténtico ensueño. Aunque lo parezca no, no soy el dueño.
Todo lo bueno en esta vida suele costar esfuerzo y trabajo conseguirlo, llegar al cutre no iba a ser menos. Al llegar a Villamayor os desvíais al final del pueblo a la izquierda donde están los manzanos de la Caja de Ahorros (enfrente de la panificadora), una vez en esa carretera ,conocida por los aficionados a los rallies por ser tramo habitual del Príncipe de Asturias, giráis a la derecha en dirección La Goleta y vais siguiendo algún que otro cartel que indica el hotel, no tiene demasiada pérdida.

Una vez allí una entrada de piedra rodea la rehabilitada casona del siglo XVIII, tiene un aparcamiento totalmente disimulado con el entorno. Al bajarse del coche ya se puede percibir que os encontrais en un lugar especial con mucho encanto. En la puerta placas de la cadena Johansens (cadena danesa de hoteles totalmente recomendable), mesas de Asturias, guía michelín, etc......Si dais un breve paseo por la finca rapidamente sentirás que estás en otro lugar, eso es lo bueno de este lugar las sensaciones que transmite aparte de su comida.

Al franquear la puerta entráis por la recepción del hotel y se accede al pequeño y coqueto comedor, todo ello con paredes de piedra y una decoración con toques de campiña muy apropiada. El comedor no es muy grande, bueno en verdad son dos pequeñas salas, el número justo de mesas para no sentir agobio ni para sentir que estás en un comedor pequeño. La decoración va a juego con el entorno, muy de campiña con las paredes revestidas de piedra. Quizás el único punto que podrían mejorar es la iluminación, con menos intensidad le daría un toque mas íntimo.
El cocinero, Tomás (toma ya parece que lo conozco como cuando lo lees en El Pais), gusta mucho de trabajar carnes de caza y guisos de cuchara como los de antes, así que la carta está inundada de carnes de caza e incluso en otoño tienen unas jornadas de las setas y caza. Aunque si no os va la caza demasiado, como es mi caso, teneis muchas otros platos con los que disfrutar.

En la carta recomiendo fervientemente su solomillo al foie con setas, merluza en todas sus variedades, lubina con costra de verduritas y salsa de oricios, merluza en todas sus variedades. Si os gusta el pescado aquí se come una de las mejores merluzas que he probado, están especializados en ello y saben como trabajarlo.

Para el postre hago un punto y aparte porque se lo merece: parfait de queso con melocotón tostado, probadlo, hacedlo por mi.

La sobremesa puede rozar lo inolvidable si con un chupito de Macallan 12 años con dos piedras de hielo os sentais en el salón verde a beberlo con calma mientras, en otoño-invierno, se va poniendo el sol, si a esto le añades un pigazin en el sillón de orejeras os iréis nuevos.






El precio es medio-alto (el del hotel bastante alto), si bien la calidad merece la pena. Suele tener unos menús de fin de semana a 25€ con bebida incluida que si os encaja puede merecer la pena (se anuncian siempre en El comercio). Sobre el hotel, ya que lo menciono, las habitaciones estandar son algo pequeñas para el precio que pagas por ellas independietemente de que tengan mucho encanto. Respecto al restaurante una comida con vino subirá de 30€ per capita con suma facilidad.Como pega tengo que decir que si bien a mi no me ha pasado ya que soy mas de cenas y evito los domingos y los domingueros por la masificación que se produce en general, que en días punta de puente o fin de semana el servicio y la salida de los platos se ralentiza en exceso y puedes estar allí tranquilamente tres horas. Aunque para las cenas suele ser mas tranquilo salvo que el hotel esté lleno o te coincida mucha afluencia ya que al estar bastante alejado de las grandes ciudades del Principado la zona invita mas a ir a pasar el dia que a desplazarse allí exclusivamente a cenar. Tambien es verdad que si nunca has ido de día te perderás sus magníficas vistas.

El servicio siempre que estuve allí fue bueno y en especial su metre es un tipo muy atento y profesional
 Muy buena opción para casi todo, para ir con la familia, para dejar a tu pareja con la boca abierta y prometiendote amor eterno si reservas una habitación en el mismo hotel o para llevar a esos amigos de fuera que vienen de visita y a los que quieres agredar. Sobre con quién compartir mesa y mantel decir que es un tipo de comida que agrada a todo el mundo, me explico si llevo a mi padre a Casa Marcial marchará de allí blasfemando sobre lo ladrón que es su dueño y el hambre con el que marcha, aquí eso no pasará y a los que nos gustan algo de cuento también marcharemos contentos.


Sin duda habrá sitios mejores, pero, o son ligeramente superiores o no los conozco.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Farol da boa nova

Restaurante Farol da boa nova
Muro dos Bacaloeiros 111, Oporto
00351 222006086



Disculpas por la pésima calidad de las fotos de hoy, bueno de las fotos en general

Como seguimos siendo muy gallos e internacionales a oporto volvimos ciudad que nos cautivó en nuestra anterior visita, teníamos por delante un pequeño viaje a A Coruña y decidimos dar un pequeño rodeo.


El comedor de hoy está ubicado en La Ribeira el barrio por excelencia de Oporto y que forma parte de la zona declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco. Concretamente encima de uno de los paredones que lindan la plaza, a escasos 100 metros de ella.

El pequeño restaurante está decorado con gusto y con muy pocas mesas, dentro no se puede fumar como en todos los locales de Portugal. Aunque lo recomendable es ocupar una mesa con vistas al Duero (está a 15 metros de tu mesa) y si ya tienes vista al puente de D. Luis I la velada puede ser memorable. Para ser justos hay que puntualizar que las mesas con vistas al puente son muy pocas ya que la mayoría dan a una pequeña plaza de Ribeira también con mucho encanto.

La carta es amplia con una buena selección de carnes y pescados, platos tradicionales portugueses aunque todos con un toque internacional sin duda adaptado a la zona turística que ocupa.

En las carnes a la plancha en todo Portugal se suele diferenciar entre “vazia y lombo”, algo así como nuestro entrecott o filete, siendo la primera una parte mas fina, entrevenada y económica y la segunda mas gruesa, magra y algo mas cara. Probamos vazia a la plancha con salsa de Oporto, como no, estaba correcto nada memorable pero se dejaba comer, y arroz tamboril o en cristiano arroz con rape (pixin), este plato estaba bastante logrado aunque los arroces en Portugal tienden a estar mas especiados que en España y tenía un regusto bastante intenso a romero y cilantro.

De vino un crianza tinto del Alentejo a un precio muy razonalbe.De postre una crema de leche.

De precio pues siguiendo un poco la tónica de nuestro país vecino, cenamos en una de las zonas mas turísticas y emblemáticas de Portugal por 16€ por persona, en terraza y con 16º C a finales de octubre, aunque esto último creo que el restaurante no tiene nada que ver.

Resumiendo una buena opción, sin demasiados alardes pero a un precio razonable para la zona que ocupa, aunque si queréis quedar bien, una cena romántica o un sitio chic optar por el Dom Tonho.

Por cierto si quereis una visión diferente, y muy muy desagradable, sobre podríamos decir el restaurante pinchar en este bizarro enlace que encontré, o mejor no ...... http://www.guiaesfinter.com/lavabo-esfinter/restaurante-farol-da-boa-nova-oporto



Marisquería Suso

Marisquería Suso
C/Ángel Rebollo 50, A Coruña
981 200 069
http://www.marisqueriasuso.es/
Tambien hay otro local sito en Plaza de Portugal 7 981 267 182







Pues a seguir a nuestro querido RSG nos dirijimos a Coruña y a comer marisco fuimos como ratoncillos tras el flautista de Hamelin.
Si visitas A Coruña y quieras ir a un restaurante seguramente lo que busques es pulpo a feira o una marisquería, como buen playu criado a 100 metros de San Lorenzo el marisco nos pudo al bolsillo y nos dirigimos hacia una de las marisquerías populares con mas fama de A Coruña: Marisquería Suso.
Para los que, como yo, no conocéis bien Coruña situaros que queda detrás del hotel Melia María Pita y caminando a no mas de 10 minutos de la plaza de María Pita y algo menos de la zona de bares de Orzan donde luego tomar un combinado para ayudar a bajar el centollo.

El local es muy pequeño tiene un pequeño comedor subiendo unas escaleras y en la planta baja tiene no mas de 5 mesas. El local pide a gritos una reforma, fluorescentes en el techo, mantelería muy simple algo gastada y sobre todo cuidado con la cabeza en el servicio de caballeros, lo digo por amarga experiencia.

Intuíamos que habíamos acertado cuando al subirnos en el taxi y decirle al conductor a la calle Ángel Rebollo, el nos contestó: “a la marisquería Suso”. Llegamos algo pronto ya que no había nadie y allí estaban la encargada y 4 cocineras mano sobre mano hablando de lo humano y divino, nos recomendó y tomó nota y pusimos a toda la cocina a trabajar, esto lo digo porque parte de la cocina está a la vista y comprobamos como sacrificaban un bugre (bogavante), preparaban el centollo, etc.... delante de nuestros ojos. Esto lo digo por una pésima experiencia que tuvimos en un local con mucho nombre y prestigio como La Zamorana donde nos sirvieron marisco que quizás había sido cocido el día anterior, pero esa es otra historia.

A la hora de comer: las mejores navajas que recuerde, un grandísimo y muy logrado pulpo con ese toque gelatinoso y un poco, solo un poco, durillo a lo que se añade ese pimentón con esa pizca de sal.....y unos centollinos, franceses o escoceses que si no la nota subía demasiado, en los centollos hubo como en los toros división de opiniones ya que uno estaba correcto y el otro no gustó demasiado. Aunque esto de los centollos, sobre todo los foriatos, es como los jamones hasta que no lo abres....

El plato principal fue arroz con bogavante o bugre para los de cimavilla. No es el arroz con bugre que tanto se empieza a estilar por Asturias muy caldoso y, en ocasiones, con escaso sabor al artista invitado: el bogavante. Aquí era un arroz sequito y bien suelto inundado del sabor que desprendió el marisco, un plato muy muy recomendable.




De postre tartas de queso y santiago, ninguno casero.

De vino un albariño muy popular y conocido como Marqués de Vizhoja, el típico de la hoja, a un precio de 7€ botella.

El precio fueron 42€ por persona que para la que comimos y bebimos no estuvo nada mal, logicamente cuando comes con marisco no puedes esperar pagar 25€ por persona, así que nos pareció muy razonable.

Resumiendo, si buscas marisco de calidad a un precio asequible puede ser muy buena opción en Coruña.